A finales del año 1991 dos Oficiales de Custodia de la Administración de Instituciones Juveniles, adscritos al Centro de Tratamiento Social de Humacao fueron interceptados en la vía pública por un vehículo mientras se encontraban realizando un movimiento de un menor confinado. En el interior del vehículo se encontraban hombres fuertemente armados cuya intención era el rescate del menor, ocasionando de esta manera la muerte de ambos compañeros oficiales.

A raíz de este incidente el cual consternó al país, la Administración de Instituciones Juveniles decidió tomar cartas al asunto y no fue hasta el 29 de julio de 1992 que la entonces Administradora, la Dra. Mercedes Cintrón expresó mediante comunicado de prensa que la Agencia haría un escogido de sus mejores 90 oficiales, donde solo se seleccionarían 20, los cuales pasarían a formar parte de un grupo de oficiales armados conocidos como el Equipo de Rápida Acción.

Debido al rápido desarrollo, crecimiento y necesidad de la Agencia, este grupo de personas fue creciendo y a su vez adquiriendo mayores conocimientos de seguridad mediante la toma de adiestramientos. Al encontrarse este equipo mucho más preparado y capacitado la Agencia decidió nombrarlo Unidad de Seguridad y Protección (USP).

Pasado algún tiempo, la Oficina de Seguridad de la Agencia comienza a realizar los trámites necesarios para que este grupo de oficiales armados fuesen nombrados como: Agentes de Seguridad y Protección, acción que fue aprobada no tan solo por el Administrador de turno, sino que también por el Senado de Puerto Rico. Logrando dicho objetivo, la Agencia comienza a enviar sus agentes a tomar diferentes adiestramientos tales como: Intervención en Crisis, Penetración de Estructura, Destrezas de Comunicación, Uso de Fuerza, Técnicas de Arresto, Extracción de Celdas, etc. Una vez todos sus agentes fueron especializados en dichas áreas, se creó lo que hoy en día se conoce como la Unidad de Operaciones Especiales (UOE).

A raíz de que la población penal juvenil comenzó a ver a los agentes con sus uniformes tácticos negros y la insignia la cual mostraba un felino, comenzaron a referirse hacia los agentes como: Los Gatos Negros. La Agencia no estuvo de acuerdo con lo ocurrido y fue entonces que se creó una nueva insignia con un casco Anti-Motín el cual significa: Seguridad y Protección. Los uniformes cambiaron a ser de color negro a gris y de gris a azul marino.

Hoy en día nuestra Agencia cuenta con aproximadamente un total de 100 efectivos ubicados en las 5 bases existentes y su entrenamiento es considerado uno de los más completos y especializados lo cual los lleva a ser solicitados por Agencias tales como la Policía de Puerto Rico y el Federal Bureau of Investigation (FBI) para realizar diferentes misiones.